La semana del 19 al 23 de marzo aprovechamos que teníamos vacaciones para ir a escalar un poco al norte. Así, después de darle vueltas a cual era el mejor plan, el domingo 18 salimos de Madrid Nacho y yo para hacer un guiaje compartido con Fer de
Sputnik Climbing hacia Lleida.
La idea inicial era empezar por Montrebei, pasar por Vilanova de Meia y terminar haciendo una invernal en la Madaleta. Pero las previsiones del tiempo hicieron que se descartara la invernal y la evolución de los días hizo que la semana acabara así:
Día 1. Montrebei. Vía Desequilibrio Hormonal.
Después del viaje, llegamos al parking de la pared de Cataluña para pasar la noche. Por la mañana nos dirigimos a la pared y escalamos este pedazo de vía.
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Pared de Cataluña |
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Vía Desequilibrio Hormonal |
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Pared de Aragón |
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Vistas desde la pared de Cataluña |
Fer se dio todos los largos salvo el segundo y el tercero que nos lo dimos yo y Nacho respectivamente. La vía tiene algunos seguros pero es mejor no tener que probarlos... El último largo es bastante expuesto.
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Fer en el primer largo |
Es una vía de grado mantenido y muy variada en cuanto a movimientos y trazados. Se nos dio bastante bien y llegamos a la cima sin problemas climatológicos. El único problema es que al llegar arriba nos aguardaba una fuerte tormenta de nieve. Aguantamos el tirón y bajamos a la furgo para salir de allí antes de que la nieve lo impidiera.
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Vámonos que lo mismo nieva... |
Día 2. Vilanova de Meia. Vía Tierra de Nadie.
Por la mañana nos dirigimos a la pared dudando si el calor nos iba a permitir escalar bien en las placas de esta espectacular pared. Al final esto no supuso mucho problema porque tras superar el primer largo de placa, nos encontramos con otros 5 largos con bastante desplome y bastante agarre. Grata sorpresa para todos salvo para nuestros biceps.
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Roca dels Arcs |
Nos fuimos dando los largos alternamente, Nacho el L2 y el L5, Fer el L3 y el L6 (algo expuesto) y yo el L1 y el L4.
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Fer en el L2 |
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Javi en el L4 |
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Javi en el L4 |
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Nacho en el L5 |
Salimos de la pared con la sensación de haber hecho una vía muy buena y con la necesidad de un merecido descanso.
Día 3. Descanso.
Después de 2 buenas cenas la noche anterior, el día apareció gris y con mucha lluvia. Aprovechamos para hacer una visita a algunas escuelas de la zona como Roca Regina, Les Bruisses y Les Bagasses.
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Primera o segunda cena... |
Después de ver que el tiempo no iba a mejorar para el día siguiente, decidimos ir hacia Riglos.
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Mallos de Riglos |
Día 4. Riglos. Vía Chopper.
La idea inicial era hacer la vía Zulu Demente a la Visera, pero una pequeña equivocación en el segundo largo y una aglomeración de cordadas en la misma vía hizo que nos bajáramos y nos fuéramos al Pisón a probar la vía Chopper.
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Javi en el L1 de la vía Mosquitos |
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Nacho directo a la Visera... |
Es una vía de grado asequible, con desplomes marca de la casa, repisas varias, algún paso duro y algún largo bastante expuesto (sobre todo el L4).
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Fer en el L4 |
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Nacho en el último largo |
Llegamos arriba sin mucho tiempo para iniciar una serie de rapeles por la misma vía algo rebuscados.
Día 5. Riglos. Vía Directa al Puro.
Después de decidirnos por no intentar de nuevo la vía Zulu Demente, nos dirigimos al puro para hacer la vía directa. Como era cara norte, nos abrigamos como para salir de fiesta...
La vía directa al Puro es un rutón. Empieza con dos largos diedros desplomados, para superar un techo en la cueva y meterse en la chimenea que te lleva a la parte más aérea hasta alcanzar la cima del puro. Hicimos los largos de forma alterna y Nacho se dio los pasos duros del desplome de la cueva y el de la entrada al último largo.
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Javi en el L1 |
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Nacho en el techo de la cueva |
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Javi empezando el puro |
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Javi en el primer largo del puro |
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Última reunión de la semana |
No pudimos ponernos de pie en lo alto del puro porque hacía un viento terrible.
Después de otros agotadores rapeles nos encontrábamos en el suelo con los cuerpos cansados pero con una sensación increíble de toda la semana haciendo vías muy buenas y variadas.
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Bar el Puro |
Ahora solo quedaba comer algo y coger la furgo de vuelta a Madrid. Ya solo quedaban fuerzas para contar anécdotas de los 5 magníficos días que habíamos pasado. Yo creo que a ninguno nos importaría repetir.
La semana ha sido increíble y nunca se me olvidara esa reunión volada del puro en la que sin darnos cuenta nos encontramos los tres cantando y gritando con una sensación de felicidad y libertad que raramente se da en otras circunstancias que no sea compartiendo una buena tapia con unos buenos amigos.
Vaya semanita!!!!